"El hombre es un dios cuando sueña... Y un mendigo cuando piensa"
¡Qué equivocado estaba Holderling!. Los sueños nos hacen más felices, sin duda; pero la razón más libres. Y no hay felicidad sin libertad. Seamos felices, pero que los sueños no nos priven del privilegio que tenemos de indagar sobre nosotros mismos y sobre lo que nos rodea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario